Nico Rosberg (Mercedes) dominó las dos sesiones de entrenamientos de hoy para el Gran Premio de Bélgica, pese al susto final con la rotura del neumático, en un día en el que la escudería Red Bull mostró su mejoría acercándose a los tiempos del equipo alemán.
La reanudación de la temporada de la Fórmula 1 tras casi un mes de descanso no trajo mayores sorpresas con la lucha entre los dos Mercedes al frente, que tuvo a Rosberg como protagonista, siendo más veloz que su compañero Lewis Hamilton en ambas tandas, con 2,4 décimas de ventaja en la primera y más de tres décimas en la segunda sesión.
Con el asfalto a más de 38 grados y el compuesto más blando de los ofrecidos por el fabricante italiano Pirelli, la goma del Mercedes de Rosberg explotó cuando superaba los 300 kilómetros por hora. "Fue un 'shock'. De repente a 305 kilómetros por hora empiezo a perder el control. Tuve suerte de evitar el muro", explicó el alemán.
Fuera de los incidentes, la jornada sirvió para reconocer el buen funcionamiento de los Red Bull en Spa, con el australiano Daniel Ricciardo pegado a los dos Mercedes en distancias por debajo de las siete décimas de segundo (tres décimas en la primera tanda) y el ruso Daniil Kvyat marcando vueltas rápidas también en la segunda sesión.
Por Ferrari, el finlandés Kimi Raikkonen demostró por qué ganó cuatro veces en este trazado -está a un solo triunfo de igualar al brasileño Ayrton Senna- poniendo su monoplaza en cuarto y quinto lugar, siempre por delante de su compañero alemán Sebastian Vettel.
Sorprendente fue la actuación de los Williams, que teóricamente deberían haber estado en los puestos de adelante, gracias a la potencia de su motor Mercedes, pero no lo demostró este viernes.
En la primera tanda el finlandés Valtteri Bottas fue décimo y su compañero brasileño Felipe Massa, decimocuarto. Después, Bottas no pasó del decimocuarto, mientras que Massa se quedó dos puestos atrás.
La jornada de mañana, con una nueva sesión de entrenamientos de una hora y la clasificación, pondrá las posiciones de salida para un Gran Premio en el que la meteorología también podría ser un factor a tener en cuenta, ya que las previsiones indican que el tiempo despejado de este viernes podría trocarse en lluvia el domingo durante la prueba, lo que daría lugar a otra carrera desconcertante como la de Hungría.
Tampoco fue una buena jornada para la escudería McLaren, que no tuvo a ninguno de sus dos pilotos por encima del decimosexto lugar.
La escudería inglesa afrontará sendas sanciones de 30 puestos para el español Fernando Alonso y de 25 para Jenson Button, y podría realizar un nuevo cambio de motor para mañana si las pruebas de hoy no les resultan satisfactorias.
