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Toyota desarrolla el GR Supra autónomo
Toyota desarrolló un sistema que, montado en un GR Supra, es capaz de hacer drift de manera autónoma
La conducción autónoma es una tecnología que lleva cierto tiempo en desarrollo, un sistema que, como aclara su denominación, busca que los automóviles circulen sin conductor.
El motivo, además de la pura evolución de la tecnología, es la reducción de los accidentes y por tanto, de los fallecidos y heridos, pero los fabricantes también experimentan con otras posibilidades.
Toyota, marca líder si las hay, no se mantiene al margen de esta evolución y logró desarrollar un sistema que, montado en un Toyota GR Supra, es capaz de hacer drift como si lo hiciera un pioto profesional en la materia.
Los autos autónomos se enfrentan a situaciones que un humano puede gestionar, actuando ya sea por instinto o por conocimientos, pero una máquina no. Por eso Toyota, está buscando enseñar al sistema a reaccionar ante situaciones complicadas como circular por una carretera nevada o helada, con barro o con una superficie que potencie la pérdida de control y los derrapes repentinos, loque genera el drift.
La marca está enseñando al sistema, con la ayuda de pilotos profesionales, a reaccionar y salvar la situación, evitando el posible accidente o quedarse varado en medio de la ruta.
El sistema que se ha implementado en el prototipo del Toyota Supra, está constantemente calculando la trayectoria.
Concretamente, realiza cálculos y analiza la situación cada 20 segundos, comprobando que el coche está equilibrado durante la marcha.
En el caso del prototipo que ha mostrado la marca, emplea un sistema programado para sortear obstáculos en una pista a medida que los identifica.
Dicho sistema controla el coche mediante frenos individuales para cada rueda, una dirección controlada por la gestión electrónica y un embrague también que se controla electrónicamente.